Con el verano comienza a rondarnos en la cabeza el uso de autobronceadores para aquellas partes del cuerpo que quedan más expuestas, especialmente para la piernas.

Aquí te vamos a dar una serie de consejos para elegir y aplicar tu autobronceador de manera que no parezcas una cebra después de la aplicación o te queden manchas difíciles de quitar.

En primer lugar debes fijarte bien en la marca ya que no todos los autobronceadores son de calidad, no hace falta que busques el más caro pero al menos contrasta las opiniones del producto en Internet o con otros consumidores.

Te aconsejamos que te declines por los autobronceadores de efecto inmediato, no esperes días para ver los resultados porque generalmente ahí es cuando ocurren los problemas de manchas ya no sólo en la piel sino también en la ropa. Eso sí, ten en cuenta que incluso los de efecto inmediato tardan unas horas en hacerse visibles así que no te pases con las cantidades

¿Cómo aplicar tu autobronceador?

En primer lugar asegúrate que tus piernas están perfectamente depiladas y lávalas con un gel. A continuación utiliza un exfoliante de cuerpo para exfoliarlas. La exfoliación te va a ayudar a conseguir una piel autobronceada sin machas ya que remueve las células muertas y las impurezas.

Una vez ya tienes tus piernas exfoliadas aplica un hidratante corporal, el que normalmente utilices, una piel previamente hidratada va a absorber de mejor manera el autobronceador y será menos posible que te queden manchas o incluso rayas.

Lo ideal es aplicar el bronceador a todo el cuerpo aunque aquí nos hemos centrado en las piernas. Aplícate el bronceador sin ropa, es decir, totalmente desnuda para evitar las molestas líneas. Comienza aplicando la crema desde las nalgas hasta los pies con cantidades medias y dando masajes circulares, asegúrate que ninguna zona queda sin cubrir. Las zonas que más problemas dan son las rodillas y los dedos de los pies, ya que en las rodillas se tiende a acumular más productos y quedan más oscuras que el resto, por lo que te recomendamos que te tomes tu tiempo para aplicar la crema autobronceadora en las rodillas. Lo mismo con los dedos de los pies, asegúrate que la crema fluye entre ellos e incluso extiéndela hasta la planta del pie para evitar val máximo las líneas y machas, no debe quedar ninguna zona por cubrir.

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