En cuanto a belleza, una de las partes que cada vez es más apreciada es una maravillosa sonrisa y para ello los dientes juegan un papel fundamental. Y es que una sonrisa preciosa cambia el rostro completamente y es un potente iluminador para el rostro, además completamente natural.

Hoy en día en el mercado se encuentran numerosos productos blanqueantes para los dientes desde pastas dentales hasta tratamientos láser. Pero para conseguir una sonrisa maravillosa no sólo es necesario que los dientes sean blancos sino que tengan una forma lo más rectangular posible y que estén perfectamente alineados, para ello te aconsejamos que hagas lo necesario, desde ortodoncias invisibles hasta un implante dental, además hoy en día las clínicas financian cualquier tratamiento.

Si no sonríes demasiado porque tus dientes están manchados o sobre todo irregulares, desde aquí te animamos a que busques un buen especialista o clínica que financie tratamientos como ortodoncias invisibles, implantes dentales o fundas dentales. Ese es el paso número uno.

El segundo paso es probar un tratamiento blanqueador, primero comienza por las pastas dentales y eso sí, evita a toda costa fumar y el café muy oscuro, procura siempre añadirle un poco de leche. En la farmacia también venden tratamientos blanqueadores o puedes optar por uno profesional, para ello consulta a un especialista.

Como rutina diaria, aparte de lavarlos al menos dos veces al día, por la mañana y por las noches, debes siempre utilizar hilo o seda dental y también procura acompañar tu rutina de limpieza dental con un enjuague que se adapte a tus necesidades.

Si tus dientes son extremadamente sensibles y los blanqueadores químicos son demasiado agresivos, aquí te dejamos con una receta casera que te va a ayudar a conseguir la sonrisa perfecta y maravillosa sin causar sensibilidad y que además ilumina el rostro. El bicarbonato de sodio se encarga de borrar las manchas profundas y el ácido málico de las fresas blanquea e ilumina los dientes.

Ingredientes:

2 fresas
1/2 cucharadita de bicarbonato sódico

Cómo prepararla

En un bol machaca las fresas con un tenedor. Añade el bicarbonato sódico y sigue mezclando y moliendo hasta que se forme una pasta espesa. Aplica la pasta resultante en los dientes y deja que actúe entre 5 y 10 minutos. A continuación enjuaga y cepíllate los dientes como de forma habitual.

Lo ideal es que pruebes esta receta para los dientes de dos a tres veces a la semana hasta conseguir los resultados deseados.